En el norte soplan vientos de locura!

                                Soplan vientos de locura!

En los mercados de Estados Unidos se manifiestan signos de mucha preocupación  ya que se esperaba una mejora en la situación económica general para el segundo trimestre del año en curso, cosa que no ha sucedido y si a eso le añadimos la caída en la productividad que en el primer trimestre fue de 0,6 % anualizada, pues nos lleva a ver un panorama sombrío que no da visos de mejoría y que esta produciendo una situación de severo estancamiento.

 En medio de la campaña electoral el entonces candidato Donald  Trump (hoy presidente), había prometido gravar con un 10 %  en vez del 35 % actual para que las empresas pudieran repatriar las utilidades y las ganancias a territorio estadounidense.

El asunto es que nada de lo que se había prometido ha sucedido y la economía camina a paso de tortuga y las grandes corporaciones estan haciendo presión para que el panorama cambie e incluso algunos Ceo de compañías estan ejerciendo fuerte presión a nivel del congreso para que se busquen paliativos a la situación de estancamiento por lo que atraviesan sus empresas. 

Pero los economistas y los propios estrategas del pentágono saben que la situación de estancamiento por la que esta pasando la economia mas grande y dinámica del mundo no es ni se debe a factores coyunturales cíclicos propios de los procesos productivos, sino que obedece a una situación mucho mas profunda y de matices variados y, que amenaza a un descalabro paulatino del dólar y a la pérdida acelerada de los mercados que otrora dominara la gran nación del norte.

  Y es ahí donde verdaderamente esta la clave para entender la crisis; la pérdida vertiginosa del predominio de los mercados y que llevó a Estados Unidos a pasar por un proceso de transición que implicó su desindustrialización y su conversión a la economía de la financiarización.

No cabe duda que el lugar que otrora desempeñara Estados Unidos en lo que respecta al dominio de los mercados, hoy lo esta desempeñando la Republica de China, quien se ha adueñado de la actividad económica industrial que es en última instancia,lo que verdaderamente implica progreso, avance.
Para solventar el mal desempeño económico y para darle validez al papel de potencia hegemónica, los Estados Unidos se ha embarcado en poner en jaque algunos países como Irán, Rusia, Corea del norte y hasta la propia China entre otros; aplicando sanciones como medidas punitivas y por diversas razones y hasta llegar al colmo de provocar una catástrofe universal.

El delirio guerrerista se ha impregnado en las paredes de la Casa Blanca y hoy la humanidad amanece bajo la incertidumbre de que en cualquier momento se pueda desatar un conflicto que puede resultar desastroso no solo para los países envueltos en el mismo, sino para toda la humanidad porque ello implicaría el uso de armas sofisticadas y de gran poder destructivo.
Solo la cordura y no la ambición de los señores alojados en Washington, es lo que pudiera evitar una conflagración que podría degenerar en la última guerra de los humanos, la Tercera Guerra Mundial.
Si y decimos la última guerra de los humanos, porque de esta llevarse a cabo quedarían muy pocos seres humanos para organizar e impulsar otra guerra.

La comunidad internacional deberá mantenerse alerta para impedir que dos o tres locos, se dispongan acabar con el planeta y con la especie que lo habitamos, porque no es la verdad que nos merecemos vivir bajo un estado total de zozobra porque algunos individuos llenos de ambiciones le dé la gana de acabar con todo. Creemos en la voluntad pacifista del hombre y lo que Estados Unidos debería hacer es volver a retomar el papel que antes tenía de potencia industrial y dejar a un lado su retórica de guerra  y de amenazas.

De seguir llevando a cabo los ejercicios militares que suelen practicar Estados Unidos y Corea del sur en las mismas narices de Corea del norte, esto bien que pudiera desencadenar en una guerra que nadie esta deseando, excepto los "jorocones" que forman el Complejo Industrial Militar; y creemos que ni a ellos le beneficia, porque a lo mejor no quedarían para contarlo, de ahí lo necesario que se retome la calma y la prudencia y que se acabe la arrogancia de potencia embravecida, porque tenemos que seguir preservando la conservación de la especie humana.
En el justo momento en que estamos elaborando este trabajo, salió una declaración del presidente de Estados Unidos Donald Trump, donde dice que baraja la posibilidad de intervenir militarmente a la hermana Republica Bolivariana de Venezuela, craso error, porque estarian convirtiendo nuestra región en otro Medio Oriente, sería el peor error de una administración americana, porque una acción de esa naturaleza tendría repercusión en todo el continente y llevará la desestabilización de la región donde un Viet Nam le quedaría chiquito.
Ojala y repetimos, que la cordura y el sentido común sea lo que prime en las paredes del Pentágono, la Casa Blanca y el Congreso de los Estados Unidos de norteamérica.